2.- Es un libro de sexo con referecias al cine escrito por una actriz porno. La chica escribe de lo que sabe: sexo y películas. No se las da de filosoraptor, ni trata de demostrar nada a nadie. A diferencia de 50 sombras de Grey que es un libro de sexo que parte como una adaptación libre de un libro para adolescentes,con demasiados sentimientos.
3.- Suprime la retórica dentro de lo posible: Le dice vagina a la vagina, no "el lugar más íntimo", le dice semen al semen, el pene es un pene y no un "magnífico miembro" y lo mejor: NO EXISTE LA DIOSA INTERIOR.
4.- Es ameno/ liviano/ fácil de leer: Está relatado en primera persona, igual que 50 Sombras de Grey, pero ¿cuál es la diferencia? que la protagonista, Catherine, es la real dueña de la historia. A diferencia de Anna, que es una protagonista pasiva, cuyos movimientos se rigen por los deseos de Grey. Catherine avanza, reflexiona, retrocede, hace referencias a figuras actuales, las cosas le gustan y no le gustan, fantasea y no se avergüenza, no le gusta Paris Hilton, y de pronto te das cuenta de que la conoces un poco, sabes más o menos cómo piensa y que ya te has leído 150 páginas.
5.- La protagonista es real: Independiente de los escenarios y de las cosas que pasen, la protagonista de esta historia es un ser humano común y corriente. Con aspiraciones y preocupaciones. Una relación que a veces funciona y a veces no, fantasías eróticas, un amor con el que desea envejecer, un amor platónico y una amiga bien puta. Habla fluído, busca en google, visita sitios porno, se masturba, fantasea, come, no le gusta el semen en la cara, tiene pelos entre las piernas, se frustra, pero sigue con su vida. Es pudorosa, pero no mojigata. En pocas palabras ES UN SER HUMANO.
6.- Más que una historia de amor, es una historia de AMOR PROPIO. Y esto en lo personal me recuerda mucho a "100 cepilladas antes de dormir" de Melissa Panarello, un libro erótico que me resulta muy querido.
7.- Usa códigos simples, entendibles por personas con un mínimo de conocimientos: Explica acerca del nombre de la Sociedad (Sí, JUliette, como la del Marqués de Sade), habla de películas, da algunos datos freak y -casi como un juego -se refiere poco y nada al porno.
8.- Como sabes quién lo escribe, te imaginas a Sasha Grey como protagonista, actuando su propio libro. Lo que no deja de ser gracioso.
9.- No es tan largo -y por ende nunca tan latero.
10.- Sus protagonistas no tienen traumas a lo Batman (aunque uno qué otro sí tenga una vida a lo Tony Stark).
11.- Las reflexiones acerca del cuerpo son muy diferentes: En 50 sombras de Grey la protagonista descubría su cuerpo, casi por primera vez, aunque dado el contexto en que lo hacía, terminaba haciéndolo de una forma un poco violenta. Todo terminaba siendo un torbellino de emociones, todo era "la primera vez" y todo le parecía nuevo y reprochable, aunque después terminara cediendo como la que más. Catherine es distinta. No es virgen, sabe perfectamente para donde va la micro, y en un plan menos adolescente no busca descubrir su cuerpo, porque ya lo conoce, sino que se "encanta" con él. Toma lo que sabe, lo lleva al límite, experimenta y busca perfeccionar lo que ha aprendido con los años y las experiencias. No busca crecer como persona, sino que saciar todos esos nuevos deseos.
12.- Los personajes se desarrollan durante el libro, no de manera lineal, sino que revelando aspectos de su vida y de su historia. En el otro libro es sólo Christian Grey el que se muestra como el resultado de sus traumas. Aquí todos los personajes tienen un pasado, una historia, y son el fruto de esa historia. No tienen vidas lineales, sino que sienten, reflexionan y hay espacio para todos (increíblemente en menos páginas).
13.- Las fantasías de Catherine curiosamente evocan muchos escenarios típicos del porno.
14.- No todos los hombres del libro son verdaderos adonis fornidos y musculosos.
15.- La gente no está todo el libro mordiéndose el labio.
16.- Catherine fantasea harto en realidad, pero se le perdona, porque las fantasías son entretenidas, bien porno, y bien... inspiradoras.
17.- El libro se ahorra esos clichés de las minas deprimidas que toman helado en pijamas de conejitos y de hombres que les mandan regalos. Las mujeres son sumisas, pero no sometidas.
18.- En todo momento la tipa sabe a lo que va. Se arrepiente y después se arrepiente de haberse arrepentido.
19.- En un par de capítulos pareciera es que la propia autora la que, saliéndose de la historia, te ofreciera una reflexión personal. Así te encuentras con sus apreciaciones sobre la vida, sobre los nombres que no le gustan para referirse a fluidos y genitales, sobre la importancia del semen como verdadero fluido originario de la vida, y cosas como fantasear acerca de usar el ímpetu masturbatorio de las miles de personas que miran porno por internet, para producir energía eléctrica.
20.- Ofrece personajes y situaciones que no son tan ajenas a la realidad. (ojo que dije "tan").
21.- Te regala un set bien amplio de frases para el bronce.
22.- El final es poderoso.
23.- Da para una continuación (y de verdad me gustaría que así fuera).
24.- Dudo mucho que Sasha Grey sea el nuevo ícono literario, pero logra crear un universo creíble -dentro de todo-ameno e interesante. Con un lenguaje simple, se vuelve mucho más accesible para el lector y fácil de abordar. Sus planteamientos son básicos, pero encierran una profundidad bien especial, puedes darte cuenta que la que habla es una mujer, que no se jacta de su experiencia y -con todo lo que ha vivido -se permite aún tener las mismas aspiraciones que todas las demás.
25.- Expone un hecho REAL y absolutamente posible: a nosotras -las mujeres -también se nos puede dejar con las ganas.